La docente y defensora de derechos humanos Vannesa Rosales, quien había sido acusada de ayudar a interrumpir el embarazo de una niña violada en Mérida, fue liberada este 21 de julio, informaron varias ONG.
"Vannesa Rosales está libre", tuiteó la ONG 100 % Estrógeno, que calificó la liberación como "un logro de todo el movimiento feminista nacional e internacional".
Al respecto, la ONG Provea escribió en su cuenta de Twitter que Rosales "nunca debió estar presa por ayudar a una niña de 13 años a abortar luego de que fuese víctima de una violación".
En el mismo mensaje, la organización agregó que "el violador (de la niña) sigue libre", razón por la cual "el caso de abuso sigue impune".
Las organizaciones UlaMujer, Promedehum y Iniciativa por una Justicia Igualitaria también celebraron la noticia de la liberación de la activista, de quien dicen que fue "criminalizada" y cuya detención calificaron como injusta.
Rosales había sido detenida el 12 de octubre de 2020 por funcionarios del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) y, desde el 11 de enero de 2021, se encontraba bajo arresto domiciliario.
La acusaron de los delitos de asociación para delinquir y por provocar el aborto de otra persona con su consentimiento, una de las causales establecidas por la legislación venezolana para castigar la interrupción del embarazo, un hecho prohibido incluso cuando hay inviabilidad del feto o en casos de violación.
Según medios locales, Rosales fue acusada de haber cobrado por el suministro de la pastilla y por supuestamente poseer 600 dosis de este tipo de medicamento, una aseveración que la defensa negó y señaló como "falsa".
Caracas / Runrunes