A José Fuentes, habitante de El Poblado, estado Nueva Esparta, le causa tristeza apreciar cómo el Puente Fajardo, uno de los más emblemáticos de la entidad oriental, se convirtió en auténtico "basurero satélite".
El lugar, que era usado por conductores y peatones para comunicarse con distintos sectores del municipio Mariño, ahora es empleado como un "vertedero improvisado", algo que causa contaminación y, a su juicio, expone innecesariamente a las personas a contraer enfermedades infecciosas.
"La Plaza Fajardo la agarraron como un botadero de basura y eso genera mucha insalubridad. Pienso que esto no es justo", dijo Fuentes, quien aprovechó la ocasión para hablar de otros problemas con los cuales lidian, a diario, los habitantes de la isla de Margarita.
Más dificultades
"Aquí, en Mariño, hay apagones constantes y también se presentan problemas con el agua. La falta de líquido genera muchas incomodidades en la gente, porque pasan entre 30 y 40 días para colocarla, y eso nos obliga a crear mecanismos para afrontar el largo tiempo de sequía".
Suárez, quien añora la época en la que la navidad era aprovechada para realizar reuniones con personas que llegaban de varias zonas de Venezuela -algo bastante complicado en tiempos de pandemia-, clama porque se limpien los ríos neoespartanos.
A su entender, preservar el medio ambiente es vital para reactivar el potencial turístico la llamada "Perla del Caribe".
"Hay que mantener los ríos limpios, porque están sumamente cochinos y tienen mucha maleza. Creo que los encargados del mantenimiento de la alcaldía de Mariño deben abocarse a corregir esa situación", añadió.
Porlamar / Joseph Ñambre