Aunque el municipio Península de Macanao, en la isla de Margarita, posee la planta desalinizadora más grande de Latinoamérica, los residentes de varias comunidades de esa jurisdicción llevan más de 45 días sin recibir agua.
Los vecinos del sector La Playa, en Boca de Pozo, han denunciado que se están organizando para exigir a las autoridades y responsables de la planta una solución a al problema que enfrentan.
María Narváez, residente de Boca del Pozo, aseguró que teniendo una planta desalinizadora tan cerca es increíble que vivan en sequía. "Hace dos años empezaron a surtir agua de la planta y estábamos felices, nos llegaba agua cada 20 días, mejor que en Porlamar o Pampatar. Toda la Península, o casi toda, tenía sus tanques llenos, pero volvió la escasez".
La situación descrita no solo repercute negativamente en los hogares, sino que también obstaculiza el desarrollo normal de las actividades académicas y laborales, así como la atención en los centros de salud.
"Estamos gastando lo poco que tenemos en camiones cisterna, es algo que no entiendo teniendo uno esa mega planta. Eso se está desaprovechando terriblemente. Espero que el gobierno y Maduro sepan lo que está pasando", dijo Luis Marcano, vecino del sector La Playa.
La planta fue inaugurada en abril de 2018 por el presidente Nicolás Maduro, quien anunció que se producirían 110 litros de agua por segundo, 30 mil botellas de agua para consumo humano y 10 toneladas de hielo diariamente. Sin embargo, estos parámetros no se están cumpliendo actualmente.
Los afectados solicitan a las autoridades estadales y nacionales que atiendan esta situación, pues se trata de algo que indiscutiblemente es una necesidad básica.
Nueva Esparta / Mario Guillén Montero
