Líderes del gobernante Partido Nacional y el principal gremio empresarial de Honduras rechazaron hoy la propuesta de la OEA de celebrar nuevos comicios como salida a la crisis del país, que amaneció con cierres violentos de carreteras convocados por la oposición, y demandaron un diálogo nacional.
"Es inaceptable, no se pueden hacer unas nuevas elecciones, no lo permite el marco legal del país", dijo a periodistas Fernando Anduray, líder del Partido Nacional.
Señaló que más de 3,7 millones de hondureños que acudieron a las urnas el pasado 26 de noviembre expresaron "su voluntad y eso debe respetarse".
El titular del Congreso Nacional, Mauricio Oliva, dijo que la propuesta de la OEA es solo "una recomendación", y destacó la voluntad del reelegido presidente Juan Orlando Hernández por iniciar un diálogo.
"Es obligatorio establecer los puentes de comunicación entre los distintos actores políticos para construir una propuesta nacional", señaló Oliva a periodistas durante un acto público.
Indicó que la crisis solo se superará mediante "un diálogo respetuoso e incluyente", y le pidió a la oposición aceptar los resultados con "humildad, objetividad y alto compromiso nacional".
La negativa de los dirigentes a celebrar nuevos comicios llega tan solo un día después de que el secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, hizo la propuesta, la cual ratificó hoy tras reunirse en Washington con el candidato de la Alianza de Oposición, Salvador Nasralla.
En su cuenta de Twitter, Almagro indicó que escuchó la posición de Nasralla sobre "irregularidades del proceso electoral" y ratificó "la necesidad de un llamado a nuevas elecciones" y "al diálogo" porque "no existen las condiciones" para declarar un ganador.
Hernández ganó los comicios con 42,95 % de los votos frente al 41,24 % que obtuvo Nasralla, quien dijo hoy estar "satisfecho" de su reunión con Almagro y alabó la predisposición de la organización a que se celebre una repetición electoral.
El presidente del Consejo Hondureño de la Empresa Privada (Cohep), Luis Larach, dijo a periodistas que respeta aunque no comparte la propuesta de la OEA sobre celebrar nuevas elecciones.
"Nosotros respetamos (aunque) no compartimos la resolución que (Luis) Almagro ha dado, pero pedimos que continúe ayudando" en encontrar "cualquier alternativa para llegar a un consenso con los políticos".
Señaló que la empresa privada reconoce que en el país "hay una problemática fuerte" causada "por diferencias políticas", por lo que pidió a los políticos "arreglarla".
En un comunicado, el Cohep indicó que en el país "no se quiere el caos" y demandó un "diálogo" entre los políticos, lo que también han solicitado las Iglesias católica y evangélica.
Instó al presidente electo a "construir las bases necesarias" para que "exista un Gobierno que implique la participación de todos los sectores políticos, a fin de asegurar el progreso económico y social basado en la estabilidad política y en la conciliación nacional".
Sobre la opción de repetir los comicios, la jefa de la Misión de Observación Electoral de la Unión Europea (MOE UE), la eurodiputada Marisa Matías, dijo que solo las instituciones hondureñas "tienen la potestad de tomar decisiones sobre el proceso electoral".
En su cuenta de Twitter, Matías indicó que a la MOE UE "no le corresponde validar ni invalidar" los resultados de las elecciones en Honduras.
En un informe presentado el domingo, la MOE UE indicó que no encontró "diferencia" entre las actas en las que la oposición alega que hubo fraude con las publicadas por el ente electoral hondureño.
Simpatizantes de la oposición continúan hoy una serie de protestas, algunas con vandalismo, en las principales ciudades del país que han dejado un lesionado y la quema de un camión en el norte del país en rechazo a la declaración oficial de las elecciones.
El diputado Rafael Alegría, del Partido Libertad y Refundación (Libre), dijo a periodistas que las manifestaciones continuarán "el tiempo que sea necesario".
"No pedimos más, solo que se respete la voluntad popular", señaló Alegría, quien lidera una protesta en el oriente de Tegucigalpa, donde los militares lanzaron bombas lacrimógenas para desalojarlos y habilitar la vía.
Tegucigalpa / EFE