La embajadora de Estados Unidos ante la Organización de Naciones Unidas (ONU), Nikki Haley, se presentó el jueves en una manifestación de venezolanos que denunciaban al gobierno de Nicolás Maduro frente a la sede del organismo y los arengó a que no bajen los brazos.
“Si tienen familiares en Venezuela, alcen la voz”, dijo Haley con un megáfono. “Vamos a seguir peleando por ellos”.
“Vamos a seguir hasta que Maduro se haya ido”, agregó.
Unos 250 manifestantes se congregaron frente a la sede de la ONU en Manhattan, Nueva York, para denunciar el gobierno de Maduro, que esta semana fue acusado de crímenes de lesa humanidad por seis países americanos ante la Corte Penal Internacional (CPI) debido a la represión de la oposición.
Encuentro
Haley, quien se bajó de un auto, habló durante un par de minutos y se fue. Estuvo separada de la muchedumbre por unas barreras en un área fuertemente custodiada, como todos los sectores alrededor del edificio de la ONU durante la Asamblea General.
La diplomática estadounidense recordó a la multitud que fue a la frontera entre Colombia y Venezuela y observó el éxodo de venezolanos que se van de su país.
“Voy a hacerme sentir y el señor (Donald) Trump va a hacerse sentir, para que ustedes sean escuchados”, afirmó Haley antes de irse.
Maduro pronunció el miércoles un discurso ante la Asamblea General y por la noche, a las 19.45 de Nueva York, se reunirá con el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, según informó la oficina de prensa del organismo internacional.
Naciones Unidas/Claudia Torrens/AP