El presidente electo de EE.UU., Donald Trump, anunció cuatro nuevas nominaciones para su gabinete de Gobierno, algunas de las cuales tendrán que ratificarse por el Senado estadounidense a partir del 20 de enero de 2025.
La más polémica de ellas es la de Russell Thurlow Vought, uno de los “arquitectos” del programa de gobierno ultraconservador Proyecto 2025, para estar al frente de la Oficina de Gestión y Presupuesto de su futura Administración.
Vought, de 48 años, ya estuvo a cargo de esa misma cartera durante parte del primer mandato de Trump (2017-2021).
“Hizo un excelente trabajo: eliminamos cuatro regulaciones por cada nueva regulación, ¡y fue un gran éxito!”, dijo en un comunicado de su equipo de transición.
Trump recordó que Vought ha pasado muchos años trabajando en políticas públicas en Washington y es un “agresivo reductor de costos y desregulador” que ayudará a su gabinete de Gobierno a aplicar su agenda de “Estados Unidos primero” en todas las agencias.
“Sabe exactamente cómo desmantelar el Estado profundo (…) y nos ayudará a devolver el autogobierno al pueblo”, añadió el futuro mandatario sobre su elegido.
También nominó en la cartera de Urbanismo y Vivienda de su futura Administración al exjugdor de fútbol americano Scott Turner, quien estuvo nueve temporadas en la Liga Nacional de Fútbol Americano (NFL, en inglés) con el Washington Redskins, el San Diego Chargers y el Denver Broncos.
Durante el primer mandato de Trump (2017-2021) Turner ejerció como primer director ejecutivo de la oficina de revitalización y oportunidad de la Casa Blanca, dedicada a las comunidades más necesitadas.
Según el comunicado del equipo de transición, esas zonas recibieron gracias a su labor unos 50.000 millones de dólares (unos 48.000 millones de euros) en inversión privada.
Trump destacó también que Turner, originario de Texas, es pastor en la Iglesia Bautista Prestonwood.
“Trabajará conmigo para hacer que Estados Unidos vuelva a ser grande para CADA estadounidense”, dijo el magnate neoyorquino, que felicitó también por el nombramiento a la mujer y al hijo de su elegido.
Por otro lado, la congresista de origen latino Lori Chavez-DeRemer será su próxima secretaria de Trabajo.
“Ha trabajado incansablemente con el sector empresarial y laboral para desarrollar la fuerza laboral de Estados Unidos y apoyar a los hombres y mujeres trabajadores”, apuntó a través de un comunicado el expresidente, que ganó las elecciones el pasado 5 de noviembre frente a la demócrata Kamala Harris.
Según ha explicado la hasta ahora congresista, la familia de su abuela emigró a Estados Unidos desde México para que sus hijos pudieran vivir una vida mejor y alcanzar su sueño americano.
“Estoy orgullosa de mis raíces latinas y de los logros alcanzados por la comunidad hispana en nuestro gran país”, apuntaba en una publicación en Facebook.
Chavez-DeRemer comenzó su carrera en el servicio público en 2002 en el Comité de Parques de la ciudad de Happy Valley, en Oregón, y más tarde ganó un puesto en el Concejo Municipal, del que luego fue presidenta.
Fue elegida alcaldesa en 2010, convirtiéndose en la primera alcaldesa latina del municipio, y reelegida en 2014.
En 2022 fue elegida para la Cámara de Representantes de EE.UU. para representar al quinto distrito del Congreso de Oregón.
Para la cartera de Tesoro del gabinete, Trump confió en multimillonario Scott Bessent, inversor y administrador de fondos.
Bessent es el fundador de la firma de macroinversión Key Square Group, en la pasada campaña electoral albergó un evento de recaudación de fondos para el republicano en Carolina del Sur y Trump lo ha descrito en el pasado como una de las mentes más brillantes de Wall Street.
En caso de que su nominación se confirme y sea validada por el Senado, a Bessent le espera un papel crucial en la supervisión de una amplia cartera que abarcará el comercio internacional, los impuestos, la regulación financiera y las sanciones estadounidenses.
El diario The Washington Post apuntó que personas cercanas al equipo de transición de Trump señalan que el financiero llamó su atención en parte por sus predicciones negativas sobre el impacto de una eventual victoria demócrata en las elecciones del pasado 5 de noviembre.
Bessent, que estudió en Yale, fue gestor de la fortuna de George Soros, pero abandonó la firma del inversor y filántropo para montar su propio fondo.
EEUU / EFE