La señora Marbella Castillo, residenciada en el sector Cruz del Encuentro de Barrio Obrero, en Píritu, reportó que su casa está a punto de ceder, pues quedó a un metro de la orilla de la quebrada Santa Rosa, luego de que maquinarias usadas para limpiar el cauce socavaran el terreno.
La afectada señaló que, desde hace aproximadamente un mes, vive con el temor de que su residencia se derrumbe, pues cada vez que llueve la tierra se desliza. Por esa causa, su tanque de agua, hecho a base de concreto, se vino abajo.
“El alcalde de la ciudad, William Petit, está al tanto de mi situación porque me he comunicado con él por Whatsapp y cada vez me dice que enviará ayuda, que viene al día siguiente y nunca llega. Ni Protección Civil ha venido a inspeccionar el riesgo”, manifestó la mujer de 69 años, quien tiene una discapacidad física.
Agregó que debido a que no tiene a donde mudarse, ha acudido a diversos medios de comunicación locales para exponer su problema y tratar de conseguir una solución.
“Cada vez que cae una lluvia, oro y lloro para que no se caiga mi casa. Mi llamado es al presidente Nicolás Maduro y a las autoridades que puedan ayudarme, no tengo hijos y vivo con una sobrina que me ayuda a sobrevivir. La alcaldía y la gobernación no me han ayudado”, expresó.
Píritu / Milena Pérez