La celebración de los vecinos de Lechería, por la festividad de la Virgen del Valle, será diferente pero no pasará por alto. Los feligreses contarán con distintas opciones para participar y honrar la imagen religiosa de su patrona.
A través de las redes sociales de la municipalidad se han difundido las convocatorias a las actividades pautadas.
"Mi canto a la Virgen" es el nombre de uno de los concursos, donde los locales de entre ocho y quince años se medirán con su voz para lograr cantar en la serenata virtual a la Virgen del Valle, el próximo 7 de septiembre.
El proceso se hará entre el 17 y el 21 de agosto.
Los interesados deben llenar un formulario, enviar el video -en formato vertical- al correo electrónico dispuesto para ello y esperar los resultados que serán notificados el próximo domingo 23.
El material de los tres mejores también será difundido en las redes sociales, para el disfrute de todos los seguidores de la zona.
Pero no solo habrá lugar para el canto pues se realizará un festival de danzas. Bajo el título de "Diosa del Mar", diversas parejas bailarán desde casa.
Los participantes pueden tener entre 12 y 25 años y deben enviar un video de una rutina con máximo tres minutos de duración.
Las mejores piezas, en honor a la Virgen del Valle, serán colgadas en las plataformas digitales, y quienes ganen el primer lugar también presentarán su dueto en el acto solemne de la víspera de la festividad de la madre de Dios.
Copa Virgen del Valle
La Dirección de Deporte del municipio pautó encuentros virtuales para las comunidades de la zona.
La Copa Virgen del Valle 2020 tendrá competencias de Ludo Club y Ludo Club Kids, torneo de ajedrez y una dinámica de búsqueda del tesoro "sigue la ruta de tu fe".
Además, se realizará un torneo de fútbol la semana previa a la de la festividad de la "patrona de oriente".
En los canales digitales se ha extendido la invitación a los morreños a participar en las actividades para honrar a la Virgen del Valle a pesar de las circunstancias y dificultades que se experimentan actualmente.
Lechería / Oriana García Rivas